Era se una vez, un gato muy muy malo, que encharcaba la entradita de la casa a su dulce y linda mamá.
La mamá no no sabía lo que realmente estaba pasando, se había ido a lo más fácil, mueve el bebedero, y tira todo el agua.
Pues nó, cual fue mi sorpresa, cuando descubrí su gran secreto, MAS QUE UN GATO ES UN PERRO, mete la patita dentro del bebedero para ir tirando todo el agua por el suelo y putear a su mamá, a la que luego le toca fragar, menos mal que existen las SUPER-FREGONAS para las mamás felinas, y no solo para eso tira el agua, se limpia los piesitos y las manitas, se ha visto algo parecido?
Mi Golfo, Tqm.