Hola Miriam,
Puesto que entiendo tu preocupación, te cuento cómo lo solucioné yo.
Yo vivía en un cuarto piso y vivía en un sin vivir, hasta que tomé medidas y me dije: “o soluciono esto de inmediato o la que se va a morir soy yo de un disgusto”.
Me fuí a la ferretería, llevando claro está las medidas de todas las ventanas y de la terraza.
Compré tela metálica galvanizada. Escuadras de tamaño grande. Alambre grueso galvanizado. Tacos y escarpias de las redondas (no clavos).¡Si esto lo lee un manitas, anda que no se reirá de mí!
Las escuadras te servirán para apoyar la tela y que se ajuste. Los tensores (2 por ventana) te servirán para tensar el alambre que pases por los agujeros de la tela, de izquierda a derecha. Evidentemente, el inicio del alambre lo atas a una escarpia de un lado de la ventana y lo tensas con el tensor al otro extremo. Esto debes hacerlo arriba y abajo para tensar los extremos superiores e inferiores. La escuadra servirá para que la tela no se quede fofa o suelta por el centro.
Tan sólo tienes que hacer perforaciones para colocar la escuadra a los lados de la fachada (arriba y abajo)
El ferretero me dijo “señora, usted no tendrá ni idea de bricolaje, pero es la idea más brillante que he oido yo en mucho tiempo”.
En fin; ya estoy tranquila dejando las ventanas abiertas porque sé que, durmiendo o jugueteando con una mosca, nunca se caerán. Además, aunque se pongan a dos patas, la tela les protege.
Si tú no entiendes cómo te lo estoy explicando, muéstraselo a alguien que entienda de bricolaje. Seguro que enseguida lo entiende.
¡Ánimo, que en foros como éste todos nos comprendemos y ayudamos!
¡Suerte!